“Los que creen que conocen todas las respuestas es porque todavía no les han hecho todas las preguntas.”
—Christopher Witt, «Real leaders don’t do PowerPoint«
Una de las mayores ventajas de las presentaciones como actos vivos de comunicación es que ofrecen la posibilidad de interactuar directamente con el público. Aquí te ofrezco 21 trucos que te ayudarán a salir airoso de la sesión de preguntas y respuestas:
ANTES
1. Planifica cuidadosamente la sesión, también forma parte de tu presentación: prepara las respuestas a las preguntas más deseadas, más probables y más temidas. Especialmente anticipa lo peor que te puedan preguntar. Lleva incluso transparencias para responder a esas preguntas, pero no las uses durante tu presentación.
2. Dicta las reglas al principio: si te pueden interrumpir, si harás una pausa a mitad para preguntas o si esperarás hasta el final.
3. Limita el tiempo asignado a preguntas y respuestas.
4. Termina dentro de la hora prevista: así permitirás la existencia de la sesión de preguntas y respuestas.
5. Cuando empiece la sesión, no la abras con “¿Alguna pregunta?” o “¿Alguien tiene una pregunta?”, porque dejas la puerta abierta a que respondan que no. En su lugar, iníciala con “¿Quién tiene la primera pregunta?” o frases similares.
6. Si nadie se anima a preguntar, suele ser más por timidez que por desinterés. En ese caso, hazte tú mismo la pregunta: “Algo que suelen preguntarme es…” y respóndete. Después, anuncia: “¿Quién quiere hacer la siguiente pregunta?”. Habrás roto el hielo y el público se sentirá más cómodo para preguntar.
DURANTE
7. Escucha la pregunta entera: no interrumpas al que te la hace porque ya imaginas lo que va a preguntar.
8. Asegúrate de haberla entendido: por ejemplo reformulándola con tus propias palabras.
9. Repítela para toda la audiencia: a veces no pueden oír las preguntas de los demás.
10. Permite que todos pregunten: no dejes que una sola persona domine la sesión. Deja la puerta abierta también a preguntas recibidas a través del backchannel.
11. Dirígete primero a quien hizo la pregunta, luego a toda la audiencia.
12. Evita ironía, sarcasmo, crítica mordaz, arrogancia, etc. Demuestra tu talla en cómo te comportas ante las preguntas buenas… y las malas. De todo hay.
13. Agradece la pregunta: con cortesía, pero sin excesos.
14. Pospón preguntas largas para el final de la sesión o para responder en privado.
15. Responde con brevedad: no se trata de que des una segunda conferencia ante cada nueva pregunta.
16. Si no sabes la respuesta, admítelo abiertamente e invita a otros a que respondan la pregunta. Nadie espera que conozcas todas las respuestas. Si es posible, promete enviarle la respuesta más tarde.
17. Discute en particular: no entres en público en bucles infinitos ni te enzarces en discusiones estériles delante de toda la audiencia.
18. No respondas preguntas off-topic: centra el tema y vuelve siempre a él.
19. Corta cuando sea necesario. Algunos no preguntan, dan su propio discurso. Cuando divaguen, pídeles que por favor formulen la pregunta.
DESPUÉS
20. No termines la sesión con la respuesta a la última pregunta, termina siempre repitiendo por última vez tu conclusión.
21. Analiza: una vez terminada, haz una valoración de la sesión. Revisa también las preguntas y comentarios del backchannel. Habrás escuchado las auténticas inquietudes de la audiencia. Ahora sabrás cuáles son sus verdaderos intereses. Gracias a esta interacción podrás enfocar mejor tu próxima presentación.
Entradas relacionadas
8 preguntas sobre la audiencia que debes responder antes de una presentación
Profundidad de procesamiento en tus presentaciones
La Maldición del Conocimiento: cuanto más sabes, peor te explicas
Diálogo abierto
¿Cómo sueles gestionar las sesiones de preguntas y respuestas? ¿Pones en práctica otros trucos que no haya mencionado?
Excelente post. Gran claridad y practicidad.
Muchas gracias por vuestras aportaciones. Creo que dan para un post: ¿Qué hacer si nadie pregunta?
Bueno, si nadie pregunta hay varias notas en este caso.
primero. no le intereso la conferencia
segunto. no te explicaste lo necesario.
tercero. por eso hay que conocer a su publico
y cuarto. haz un resumen y dale una calurosa gracias por su asistencia.
Sí, desde luego la falta de preguntas puede deberse a muchas causas. En la entrada doy un truco para cuando la causa es timidez por romper el hielo.
¡Magistral! Más que un post, material obligado de consulta. Muchas gracias. Qué aporte.
Hola Gonzalo! No conocía tu blog. He llegado a él vía José Miguel Bolívar (@jmbolivar) desde Twitter. Muy interesante blog, y muy interesante post.
Otra opción para el punto 6 y que me pareció curiosa es la que utiliza Rodolfo Carpintier en sus ponencias. En el descanso pide a los asistentes que escriban en unos papeles sus preguntas, y luego las va leyendo y contestando. Así los más tímidos pueden participar, aunque si no hay break o quieren preguntar algo del final, la cosa se complica.
¿Qué tal por Twitter en tiempo real? Mucha gente ya tiene un smartphone, y no sería nada complicado…
En fin, enhorabuena por el blog!
Un saludo,
José Miguel
Hola Gonzalo,muy bueno el post!
Tanto como para aportar al diálogo abierto,referido al truco 6, lo que yo uso a menudo, es pedir que con sus compañeros de al lado (en dúos o tríos) formulen una pregunta y me la den por escrito. Esta pequeña dinámica levanta el interés del auditorio y promueve que los tímidos también pregunten.
Saludos,
Sergio