Cuando debemos comparar datos, siempre nos enfrentamos al desafío de cómo hacerlo eficazmente, de manera que las relaciones queden claras y se comuniquen con nitidez a la audiencia. Normalmente, una de las formas más eficaces de comparar cantidades es mediante los gráficos: de barras, circulares, lineales, logarítmicos, etc. Con este tipo de gráficos se corre el riesgo de perder el contexto a beneficio de acentuar las comparaciones cuantitativas.

Esta preocupación aquejó igualmente a los ilustradores de atlas del siglo XIX, quienes, de formas muy creativas, se esforzaron en mostrar en sus diagramas topográficos las comparaciones entre las longitudes de los distintos ríos y las alturas de las distintas montañas. Lo resolvieron con gran éxito mediante las perspectivas comparativas. A continuación se muestran varias fotografías de estas hermosísimas ilustraciones. Pueden encontrarse muchas más en River Deep Mountain High.

“Comparative Heights of the Principal Mountains and Lengths of the Principal Rivers of The World”, ilustrado por W. R. Gardner en 1823.

“Comparative Heights of the Principal Mountains and Lengths of the Principal Rivers of The World”, ilustrado por W. R. Gardner en 1823.

A Comparative View of the Principal Waterfalls, Islands, Lakes, Rivers and Mountains in the Western Hemisphere, John Tallis & Co., 1850.

"A Comparative View of the Principal Waterfalls, Islands, Lakes, Rivers and Mountains in the Western Hemisphere", John Tallis & Co., 1850.

A comparative view of the lengths of the principal rivers of Scotland, John Thomson, 1831.

"A comparative view of the lengths of the principal rivers of Scotland", John Thomson, 1831.

Obsérvese cómo los ríos aparecen dibujados en los distintos diagramas con todo lujo de detalles, incluyendo planicies, lagos y otros accidentes de las cuencas fluviales. El diagrama, más allá de un mero gráfico de barras decorado, consigue transmitir y comparar no sólo la longitud sino la hidrografía de cada río.

Tal vez con menos éxito, debido a la excesiva estilización de las montañas y a su apiñamiento, el ilustrador busca también comparar las alturas de las distintas montañas, brindando menos detalles de su orografía.

En cualquier caso, esta mirada atrás al pasado de la representación visual de la información seguro que puede inspirarnos en el futuro cuando encaremos al reto de comunicar datos de manera cautivante y memorable.

Una nueva forma de mirar al mundo

Gráficos: ¿un juego de niños?